En los últimos años, la preocupación por la salud y seguridad de las baterías ha crecido de manera significativa. Esto, ha sido, lógicamente, impulsado por el aumento exponencial del uso de vehículos eléctricos y productos a batería, pues este tipo de tecnología ha revolucionado sectores clave como el transporte, la electrónica de consumo o las energías renovables, permitiendo avances sostenibles en eficiencia energética y reducción, en gran medida, de emisiones. Sin embargo, con esta expansión, también han surgido inquietudes sobre la seguridad y el impacto ambiental de las baterías.
Por esta razón, a medida que la demanda de baterías ha crecido, muchos fabricantes han centrado sus esfuerzos en mejorar tanto su rendimiento como su seguridad. Gracias a estas mejoras, hoy en día las baterías de muchos fabricantes oficiales se han vuelto sistemas altamente seguros y estables, con protecciones avanzadas contra sobrecargas, cortocircuitos y temperaturas extremas.
Tal es el caso de Smartgyro, pues hemos trabajado durante años con un enfoque muy centrado en mejorar el rendimiento y la seguridad de nuestras baterías. Siendo conscientes de la importancia de ofrecer productos fiables y seguros, hemos invertido considerablemente en investigación y desarrollo para perfeccionar nuestras baterías, asegurando que cumplan con los más altos estándares de calidad y seguridad.
Uno de nuestros logros más destacados es la patente de una tecnología avanzada que hemos denominado "OPS" (Overheating & Short-circuit Protections). Esta innovación incorpora tres sistemas muy interesantes: