Los pinchazos son algo con lo que cualquier dispositivo que funcione con ruedas, debe convivir a lo largo de su vida. Para muchos usuarios, esto resulta muy molesto debido, no solo a los retrasos que se causa con ello, sino también al riesgo de sufrir daños adicionales y al esfuerzo y tiempo necesario para su reparación. Es por ello que muchas personas toman la decisión equivocada de utilizar ruedas macizas para minimizar estos inconvenientes.
El problema está en que este tipo de rueda, no tiene capacidad de absorber impactos y vibraciones de la misma manera que una rueda neumática, es mucho más incómoda y ofrece una menor tracción y resistencia, lo que resulta perjudicial para la estructura del patinete.
Por ello, es importante que sepáis que las ruedas macizas ofrecen grandes y perjudiciales desventajas en comparación con las ruedas neumáticas.
En primer lugar, la comodidad. Las ruedas macizas son muy rígidas, no tienen capacidad para absorber impactos y vibraciones como lo hacen las ruedas neumáticas. Esto puede hacer que la ruta sea más incómoda, especialmente en superficies irregulares o terrenos con baches.
Por otro lado, la amortiguación. Las ruedas neumáticas contienen aire, y esto les permite actuar como amortiguadores naturales. Esta característica, les ayuda a reducir la presión no solo sobre el cuerpo, si no también sobre el equipo o vehículo, protegiendo tanto el dispositivo como su carga, de daños causados por golpes o impactos.
Factor importante también, la tracción. Las ruedas macizas pueden ofrecer menos tracción en comparación con las ruedas neumáticas, especialmente en superficies resbaladizas o húmedas. Esto puede afectar el rendimiento del patinete y dificultar el movimiento bajo ciertas especificaciones.
Además, debemos hablar de la durabilidad. Aunque las ruedas macizas pueden ser resistentes a pinchazos y perforaciones, son más propensas a desgastarse más rápidamente debido a su diseño sólido y a la falta de capacidad de absorción de impactos.
Por todo ello, es importante que tengáis claro que las ruedas macizas pueden ser una opción adecuada en ciertos contextos donde la resistencia a pinchazos y perforaciones es fundamental, como en aplicaciones industriales o de carga pesada. Sin embargo, para la mayoría de los vehículos y dispositivos que requieren un viaje suave, una buena tracción y comodidad, las ruedas neumáticas y, si queréis evitar todo tipo de pinchazos y complicaciones, las que incorporan gel adaptativo, son preferibles debido a su capacidad de amortiguación y adaptabilidad en diferentes condiciones de terreno.